A través de los llamados receptores celulares, las vitaminas y los minerales son llevados en vuestro cuerpo allí donde se necesitan. Para ello, hay un receptor determinado responsable de cada vitamina, comparable con lo que ocurre con una llave que solamente se adapta a una cerradura. Los receptores deberían cuidarse al igual que muchas cerraduras que se han de engrasar de vez en cuando para que funcionen perfectamente. Esto se puede realizar para vuestros receptores a través de mis fuerzas mágicas y, seguidamente, las vitaminas introducidas pueden volverse a utilizar de forma correcta..

Tan exclusivo e individual como es cada visitante, tan exclusivas e individuales pueden ser las reacciones a los problemas. Empezando desde un gran cansancio hasta un sueño profundo de varios minutos, bostezos frecuentes y profundos, hormigueos e incluso sensación de entumecimiento de las extremidades, sensación de flatos en la región abdominal, calor, frío, mareo, dolor de cabeza, migraña, gran pesadez hasta llegar a no poder levantar un brazo o una pierna. Los órganos pueden sentirse profundamente; sensación de estrechez o de tener una bola en el cuello, se notan secciones completas de la columna vertebral, claras reacciones en la zona del corazón, pesadez y estrechez en el pecho o dificultad para respirar e incluso ahogo. Se pueden experimentar claramente sensaciones anheladas. La escala de las posibles reacciones es infinita. Esto no ha de asustar al visitante, sino advertirle de que la intensidad y la localización de las reacciones producidas no siempre responden a las expectativas de la conciencia en estado de vigilia.